Energía solar
Placas fotovoltaicas

Produce tu propia energía con placas fotovoltaicas de última generación y evita seguir pagando facturas desorbitadas gracias al autoconsumo. La instalación de placas solares es una estupenda opción si lo que quieres es ahorrar en la factura de la luz y tener independencia energética.
Podemos tener diferentes intereses según nuestra situación: placas solares fotovoltaicas con conexión a red para reducir la factura de la luz y asegurarnos de la disponibilidad en cualquier momento de energía eléctrica; o una instalación aislada que te permita disponer de electricidad allá donde no llega la red eléctrica.
Cómo realizamos las instalaciones de placas fotovoltaicas
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Estudio de la instalación y propuesta
En una primera etapa se analizan las posibilidades del lugar donde se quieren instalar los paneles solares y el consumo actual que se está realizando. Tras este primer análisis, el personal técnico realiza un estudio de la tipología, orientación y superficie de la cubierta en la que se instalarán los paneles solares; así como de las posibles sombras que hayan para asegurar el mejor rendimiento de la instalación fotovoltaica. Este estudio se presenta y explica al cliente para su aprobación.
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Memoria técnica, proyecto y servicios
Una vez aprobado el proyecto por el cliente, se presenta en el Ayuntamiento la documentación y la solicitud de licencia; momento en el que se abonan las tasas e impuestos correspondientes. Respecto a las subvenciones, muchos Ayuntamientos tienen previstas bonificaciones para las instalaciones de autoconsumo, por lo que habría que tener en cuenta lo establecido en cada municipio.
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Instalación, certificado y registro
Tras la obtención de los permisos necesarios, el primer paso antes de colocar los paneles solares es anclar los soportes sobre la cubierta. Una vez anclada la estructura, los paneles solares se fijan a la misma y se conectan entre sí y, por último, se conectan al inversor. De esta manera, la energía recogida por cada panel a través de la radiación solar llega en forma de corriente eléctrica hasta el inversor, que estará ubicado cerca del cuadro eléctrico y al cual se conecta. Si es una instalación aislada, se conectarán también las baterías para almacenar la energía producida.
Una vez terminada la instalación, se prueba su funcionamiento, se emite un certificado de instalación y se inscribe en el registro autonómico correspondiente.
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Testimonios
Qué opinan nuestros clientes
Son nuestro asesor energético desde hace varios años y siempre han cumplido con todo lo acordado, consiguiendo bajar nuestra factura eléctrica considerablemente.
Necesitábamos bajar los costes energéticos de nuestra empresa y llevar un control de las diferentes plantas de producción. Tras varios ajustes y con la telemedida hemos conseguido tener bajo control el gasto energético.
Conseguimos un gran ahorro en la factura de la luz solo con el análisis de nuestros consumos, la adecuación de la potencia a nuestra demanda real y una mejora en la tarifa. Hemos conseguido ahorrar casi tres facturas y sin tener que preocuparnos de nada.